En el articulo anterior os hablaba de Allariz y os enseñaba algunas de las cosas que se podían disfrutar en esta localidad, así que para poner el cierre a este mini tour por el interior de la provincia de Ourense os enseñaré un poco de su Capital de provincia.
Ourense es sobre todo conocida por sus recintos de aguas termales y balnearios, que lo hacen objetivo de un cada vez más popular turismo termal. Todo comienza en la fuente de las burgas, con su agua minero-medicinal brotando de una fuente en el mismísimo centro de la ciudad donde desde hace décadas, los habitantes de la ciudad se acercan a coger agua con la que lavarse, dejar que enfríe (sale a unos 65 ºC). Aunque ese no fue el único uso que se le daba al agua ya que al parecer años atrás desplumar una gallina escaldándola estaba a la orden del día. Hoy día se puede dar uno un baño caliente en las mismas aguas aprovechando el balneario urbano que se ubica justo en la misma plaza.
Saltando de la más antigua a la más moderna, Outariz, en las afueras de la ciudad, es el más innovador recinto termal de la zona, disponiendo de 2 pozas completamente gratuitas al aire libre, en una zona de lo más tranquila, si hacemos caso omiso a la autopista que pasa por allí cerca. Este recinto es más que suficiente para una buena sesión de relax, pero el abanico de opciones aumenta con solo acercarse a escasos metros al balneario recientemente construido que ofrece una selección de circuitos termales imitando con mayor o menor acierto los onsen japoneses, ofreciendo saunas, piscinas de distintas temperaturas, formas y selecciones de múltiples chorros y corrientes por un muy módico precio de unos 5€.
Y dejo para el final otra de las zonas termales más populares de la ciudad. As chavasqueiras se encuentran a medio camino entre el centro de Ourense y Outariz siendo por lo tanto un lugar más cercano que visitar desde el centro, o la primera parada de un paseo termal antes de finalizar en Outariz, ya que un camino peatonal por el que ir paseando o en bicicleta permite la visita a ambas localizaciones.
As chavasqueiras son también unas pozas al aire libre, con un acceso directo al lecho del río que facilita el realizar contrastes de temperatura entre el calor de las pozas y el frío del agua del Miño.
En otro orden de cosas, y después de la relajante sesión de balnearios, no debemos olvidarnos de que es carnaval, y la noche orensana tiene actuaciones por la calle a la vuelta de cada esquina, licor café y cerveza, música, disfraces, luces de colores atravesando lo alto de la calle, y en resumen comida, bebida y fiesta allá donde fueras.
Y claro, después de una noche de carnaval, toca levantarse al día siguiente, lo más tarde que el sueño nos permita, que ya se sabe que a veces uno no duerme todo lo que quisiera, ni todo lo que le dejan. El día nos dejó otra celebración, esta vez con una buena actuación de gaiteiros, pulpo, carne y vino justo al lado del puente romano, el puente más antiguo de los muchos que cruzan el Miño para comunicar Ourense a ambos lados del río.
Y claro, si algo tiene Ourense son puentes, desde el más antiguo puente romano que lógicamente data de cuando los romanos campaban por estas tierras, reconstruido en diversas ocasiones hasta acabar siendo lo que hoy se puede apreciar, hasta el más moderno puente del milenio inaugurado como su nombre indica, en el 2001 coincidiendo con los años del cambio de milenio. Éste último destaca sobre todo por sus pasarelas peatonales curvas trazando subidas y bajadas de hormigón y acero.
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Ourense, Galicia
Febrero 2012